Instituto para las Obras de Religión
El Instituto para las Obras de Religión (I.O.R), es una institución de la Iglesia Católica que se encuentra dentro de la Ciudad del Vaticano (Estado del Vaticano). Su función es la de servir como Banco y depósito de capital monetario, el cual se encarga de financiar todas las órdenes religiosas de la Iglesia Católica y de la propia Ciudad del Vaticano.
A esta Institución, se la conoce también coloquialmente con el nombre de: "Banco Vaticano". Este es el nombre que utilizan todos para referirse a esta Institución, salvo la Iglesia. El Banco Vaticano, es una de las cuatro fuentes de financiación de la Iglesia Católica, las cuales son: EL Óbolo de San Pedro (donaciones voluntarias de fieles y particulares, manejadas por una comisión de cardenales); El citado Banco Vaticano; las rentas producidas por las inversiones realizadas por la Administración del Patrimonio de la Santa Sede y por último, los ingresos producidos por la venta de diferentes mercancías, muchas de ellas, de dudosa moral cristiana.
Contenido
Origen y Fundación
Con el aterrizaje del capitalismo en Europa en el siglo XIX, la Iglesia Católica tuvo que adaptarse al nuevo sistema económico, creando un banco para financiar sus actividades, llamado de forma coloquial como "Los Peniques de Pedro".
Tras la pérdida de los Estados Papales por parte de la Iglesia, en tiempos de la Unificación de Italia, tuvo que esperar a tiempos mejores para volver a recuperar un centro de operaciones propio. La llegada del Fascismo Italiano fue una ocasión inmejorable.
El nacimiento del Banco Vaticano (aunque no de forma oficial), tiene lugar mediante la firma del Tratado de Letran. Benito Mussolini otorgó a la Iglesia una serie de garantías y medidas de protección. La Santa Sede consiguió que la reconocieran como un estado soberano, se benefició de la exención impositiva de sus bienes como en beneficio de sus ciudadanos; tampoco tenían que pagar derechos arancelarios por lo que importaran al extrangero; se le concedió la inmunidad diplomática y sus diplomáticos empezaron a gozar de post-privilegios de la profesión, al igual que los diplomáticos extranjeros acreditados ante la Iglesia.
En 1933, el Vaticano volvió a demostrar su habilidad para entablar lucrativos negocios con gobiernos fascistas. Al concordato de 1929 con Mussolini, le siguió otro con el Tercer Reich de la Alemania de Hitler. Una de las ventajas de la firma de este pacto con Hitler, fue la confirmación del Kirchensteuer, que consiste en un impuesto eclesiástico. Hoy en dia, aún sigue existiendo este impuesto, el cual solo deben pagarlo todos los contribuyentes que se declaren creyentes, y solo pueden eludirlo si renuncian a dicha religión (en la práctica, son muy pocos los que renuncian a ella), y representa entre el 8 y el 10% del total impositivo que recauda el gobierno alemán. No fue hasta el 27 de Junio de 1942, cuando la Iglesia Católica crea de forma oficial el Instituto para las Obras de Religión.
Mafia y Asesinatos
Uno de los mayores escándalos de esta Institución, se encuentra en el caso de la Quiebra del Banco Ambrosiano, donde el Banco Vaticano es el principal accionista de dicho banco. Desde la llegada de Paul Marcinkus como interventor en las diversas acciones que llevaba a cabo el Banco Vaticano, el tráfico con dinero negro, la evasión de capitales y las dudosas inversiones de la Iglesia en la Bolsa Estadounidense en especial, fueron algo normal y siempre bajo la supervisión del Papa que estuviese en el poder: Pío XII o Pablo VI. El banco Ambrosiano quebró debido a que se descubrió un agujero fiscal de nada menos que 1400 millones de Dólares en 1981, dinero que perdieron todos aquellos que tenían alguna cuenta en dicho banco y que posiblemente se halle en las "Arcas de Pedro". El Finabank también formaba parte de la gigantesca empresa de limpieza de dinero sucio que trabajaba para la mafia y por ende para el vaticano, las empresas de Canadá y México se usaban para hacer llegar a Estados Unidos a través de las fronteras canadiense y mexicana el dinero en dólares de la mafia, de los francmasones, y de muchas otras empresas y operaciones ilegales de carácter delictivo. Llegaba en maletas y se invertía en bonos del Estado, que luego se enviaban al Finabank, por ser limpios y fácilmente negociables; Si la mafia quería hacer regresar a Italia este dinero, previamente limpiado utilizaba los canales del Banco del Vaticano.
Además de los miles y millones que la Iglesia, a lo largo de su dilatada historia, ha ido asesinando cuando alguien osaba denunciar la gran opulencia en torno a esta religión, existe una lista de asesinados durante el siglo XX, relacionados con asuntos con el Banco Vaticano, de sacerdotes, obispos, cardenales e incluso un Papa, personas que no son ajenas al entorno de la Iglesia Católica, sino todo lo contrario, facilitada en el libro "La santa mafia del Papa", escrito por Robert Hutchison:
- 1975: El senador francés príncipe: Jean de Broglie.
- 1977: El gerente del banco Leclerc de Ginebra: Charles Bouchard.
- 1978: El Padre: Giuliano Ferrari.
- 1978: El patriarca ortodoxo: Niko Dim
- 1978: El Papa: Juan Pablo I (Albino Luciani).
- 1978: El Secretario de estado y Cardenal: Jean Villot.
- 1981: Logia P2: Francesco Cosentino.
- 1982: El banquero milanés: Roberto Calvi.
- 1982: El anticuario: Giorgio Di Nuncio.
- 1982: El cardenal: Benelli de Florencia.
- 1985: El ex-ministro de relaciones exteriores de España: Gregorio López-Bravo.
- 1985: El banquero: Ricardo Tejero.
- 1986: El empresario marítimo: José María Aristrain.
- 1986: El mafioso: Michele Sindona.
- 1986: Un fallido intento de asesinato del empresario y miembro del Opus Dei: J.M. Ruiz-Mateos.
- 1986: El Juez del tribunal Constitucional: Manuel García Pelayo.
- 1994: El arzobispo salvadoreño: Rivera Damas.
- 1998: El director de la filial del Banco Vaticano en Nápoles: Aldo Palumbo.
Se sospecha, que muchos de los nombres que aparecen en dicha lista, fueron envenenados con una sustancia que mata lentamente al producir fallos cardiacos, llamada Digitalis Glucosides. Murieron bien por infarto de miocardio o fallo cardiaco los mencionados: Albino Luciani, Jean Villot o Giuliano Ferrari entre otros murieron en estas circunstancias.
Movimientos de la Institución en la actualidad
En 2002, la Red de prensa Voltairenet, ha calificado al Banco Vaticano, la octava entidad financiera más usada para el blanqueo de dinero, por delante de paraisos fiscales como Suiza, Bahamas o Liechtenstein.
El 23 de septiembre de 2009, el nuevo titular del Banco Vaticano es Ettore Gotti Tedeschi, hombre del Banco Santander en Italia. Colaboradores del Pontífice Benedicto XVI solicitaron a Emilio Botín dicha autorización. Fuentes del Banco Santander han confirmado las "buenas relaciones" con el Banco Vaticano.
El 25 de noviembre de 2009, La Fiscalía de Roma, investiga la verdadera titularidad de una o varias cuentas corrientes abiertas en Unipublic a nombre de la I.O.R. Los investigadores sospechan que a través de las siglas I.O.R. pueden ocultarse personas físicas o sociedades a través de esa cuenta y hayan creado un canal para le flujo de recursos entre el Banco Vaticano e Italia. Entre esa cuenta, han pasado 60 millones de Euros anuales en los últimos tres años.
Enlaces Externos
- http://monasterio-en-lucha.blogcindario.com/2009/12/00071-banco-vaticano-dinero-manchado-en-sangre.html
- http://www.monografias.com/trabajos15/vaticano/vaticano2.shtml
- http://es.wikipedia.org/wiki/Instituto_para_las_Obras_de_Religi%C3%B3n
- http://www.rtve.es/noticias/20091125/las-cuentas-del-banco-del-vaticano-unicredit-investigadas-por-fiscalia/302743.shtml
- http://www.voltairenet.org/article120092.html
- http://www.urgente24.com/index.php?id=ver&tx_ttnews